Ventajas

La enseñanza a distancia se convierte en el sistema adecuado para atender la creciente demanda de formación institucional y empresarial, no ya como sistema alternativo, sino como idóneo para diferentes niveles formativos, incluido el universitario, adaptándose a las necesidades y personalidad de cada participante. Contrariamente a lo que se puede pensar, permite una atención más personalizada de lo que (en la mayoría de los casos) es posible en una clase presencial, debido a que los tiempos disponibles no se limitan a las 6 u 8 horas de la clase in situ.

Por otra parte, los participantes llegan a la etapa de consulta habiéndose familiarizado con el material. Esto, es algo bastante difícil de lograr en clases presénciales en las cuales el participante suele profundizar el material una vez terminado el curso. También se debe destacar una mayor carga horaria, que al estar distribuida en el tiempo de duración del diplomado permite a los participantes realizar sus estudios y practicas de una forma mas descansada.

El aprendizaje se produce en el momento y los lugares que el participante lo desee. Esto no solo mejora considerablemente la predisposición, y en consecuencia la asimilación de los conceptos, sino que le permite al participante recorrer el material con su propio ritmo, según sus necesidades personales, llegando mucho mejor preparado a las instancias de desarrollo de practicas y evaluaciones, así como al análisis de casos, preparación de informes y al desarrollo del proyecto.